Porsche anunció recientemente que los socios internacionales que trabajan con la empresa chilena Highly Innovative Fuels han iniciado la producción industrial de combustibles sintéticos, también conocidos como eFuels, que son fabricados a partir de agua y dióxido de carbono mediante energía eólica, y permiten el funcionamiento casi neutro en emisiones de dióxido de carbono de los motores de gasolina.
La planta piloto, llamada “Haru Oni”, se localiza en la ciudad de Punta Arenas, Chile, y se prevé que produzca aproximadamente 130,000 litros de combustible al año. Tras la fase piloto, la producción se incrementará hasta los 55 millones de litros anuales para mediados de la década. Posteriormente, dos años más tarde, se espera que la capacidad sea de 550 millones de litros.
La compañía expresó que está trabajando para conseguir un balance neutro de dióxido de carbono en toda la cadena de valor de aquí a 2030. Además, señaló que los combustibles sintéticos complementan la electromovilidad y forman parte de su estrategia de sostenibilidad, y por lo que ya han invertido más de 100 millones de dólares en el desarrollo y la producción de eFuels.
“El potencial de los eFuels es enorme. Actualmente hay más de 1,300 millones de vehículos con motor de combustión en todo el mundo. Muchos de ellos seguirán circulando durante décadas, y los eFuels ofrecen a los propietarios de los coches actuales una alternativa casi neutra en carbono”, afirmó Michael Steiner, miembro del Consejo Ejecutivo de Desarrollo e Investigación de Porsche AG.
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