Rolls-Royce y Neste, productor de combustible renovable, establecieron una asociación estratégica para acelerar el uso de combustible renovable como una solución de menores emisiones para los motores diésel.
Esta colaboración se centrará en promover el uso de combustibles más sostenibles en aplicaciones basadas en la tecnología actual de los motores de combustión interna, en acelerar adopción de combustibles renovables y en aumentar el intercambio de conocimientos sobre el combustible renovable y los beneficios que aporta.
Ambas compañías expresaron que los combustibles renovables desempeñan un papel clave en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero en aplicaciones como la construcción y la generación de energía.
“A través de nuestro programa de sostenibilidad, nos hemos comprometido a reajustar nuestra cartera de productos para que, en 2030, los combustibles sostenibles y las nuevas tecnologías reduzcan nuestras emisiones de gases de efecto invernadero en un 35% en comparación con 2019. Nuestra colaboración con Neste, el principal productor mundial de diésel renovable, nos ayudará a alcanzar nuestros objetivos y los de nuestros clientes”, declaró Tobias Ostermaier, presidente de Stationary Power Solutions de la unidad de negocio Power Systems de Rolls-Royce.
“Desde mayo de 2022, Rolls-Royce ha aprobado los motores para el diésel renovable y otros combustibles que cumplen las especificaciones de la norma EN15940. Las pruebas que hemos realizado muestran adicionalmente una reducción de hasta el 90% de los gases de efecto invernadero, hasta un 80% menos de emisiones de partículas y una media del 8% de reducción de óxido de nitrógeno. Todas nuestras pruebas confirmaron niveles de rendimiento completos sin necesidad de modificar los motores”, señaló Michael Stipa, vicepresidente de Estrategia Estacionaria, Desarrollo de Negocio y Gestión de Producto de Rolls-Royce Power Systems.
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