Coca-Cola empezó a adoptar el uso de combustibles sostenibles para transportar sus productos. Esta iniciativa está siendo implementada en los en los Países Bajos, utilizando el combustible renovable HVO100 de la compañía Neste para llevar a cabo sus actividades logísticas.
HVO100 es un combustible sostenible de alta calidad producido a partir de materias primas renovables, es una alternativa al combustible fósil, permitiendo reducir de manera significativa las emisiones de gases de efecto invernadero emitidas por los vehículos con motor diésel.
El combustible renovable contribuye a reducir las emisiones de gases de efecto invernadero en un 90% en promedio si se comparan las emisiones producidas durante el ciclo de vida del combustible fósil. Además, el combustible renovable es totalmente compatible con todos los motores diésel y no se requiere ninguna modificación de los vehículos existentes ni de las infraestructuras de distribución.
“Estamos muy orgullosos de trabajar con Coca-Cola en los Países Bajos. Estamos comprometidos a apoyar a nuestros clientes para que reduzcan sus emisiones de gases de efecto invernadero en al menos 20 millones de toneladas anuales para el año 2030”, declaró Peter Zonneveld, vicepresidente de Ventas de Transporte Renovable por Carretera de Neste para Europa y la región Asia-Pacífico.