Intel anunció recientemente que realizará una inversión inicial de más de 20,000 millones de dólares en la construcción de dos nuevas fábricas de chips en Ohio, Estados Unidos. La inversión impulsará la producción de semiconductores avanzados para satisfacer la creciente demanda de estos componentes.
Se contempla que esta nueva locación pueda albergar un total de ocho fábricas de chips, así como operaciones de apoyo y socios del ecosistema. Si se completa la construcción, la inversión total en el proyecto podría ascender a 100,000 millones de dólares durante la próxima década, lo que lo convertiría en uno de los mayores centros de fabricación de semiconductores del mundo.
La compañía afirmó que la construcción de las primeras dos fábricas iniciará a finales de 2022 y que la producción de semiconductores comenzará en 2025.
“Las acciones de Intel ayudarán a construir una cadena de suministro más resistente y garantizarán un acceso fiable a los semiconductores avanzados en los próximos años. Intel está trayendo de vuelta a los Estados Unidos una capacidad líder para fortalecer la industria mundial de semiconductores. Estas fábricas crearán un nuevo epicentro que reforzará la cadena de producción nacional de Intel y fortalecerá el liderazgo de Ohio en investigación y alta tecnología”, declaró Pat Gelsinger, CEO de Intel.