BP, empresa líder del sector energético, y Maersk Tankers, empresa que ofrece soluciones de gestión comercial al sector petrolero y filial de la naviera Maersk, con el apoyo de la Autoridad Marítima Danesa, han completado con éxito las pruebas de uso de combustible marino mezclado con biocombustible en buques cisterna, demostrando que los biocombustibles sostenibles pueden utilizarse para ayudar a reducir las emisiones de carbono en el transporte marítimo.
Las pruebas se llevaron a cabo en los buques cisterna Maersk Cirrus y el Maersk Navigator. A cada buque se le suministró biocombustible BP Marine B30, compuesto por un 30% de ésteres metílicos de ácidos grasos mezclados con combustible de muy bajo contenido en azufre. El biocombustible utilizado tiene propiedades físicas similares a las del combustible convencional, es biodegradable y no es tóxico.
Durante las pruebas, los buques navegaron desde Rotterdam, ciudad localizada en los Países Bajos, hasta África Occidental. En las pruebas se evaluó la fiabilidad y el rendimiento de la mezcla de biocombustible B30 en el motor principal, el motor auxiliar y la caldera de cada buque. BP afirmó que no se observaron efectos adversos en el equipo o la maquinaria durante o después de las pruebas y no fue necesario realizar ninguna modificación en el motor o en la infraestructura.
“Con la ambición de ser una empresa con cero emisiones netas para 2050 y ayudar al mundo a conseguirlo también, es vital que ayudemos a descarbonizar este sector. Estamos orgullosos de trabajar con un socio como Maersk Tankers, para desarrollar nuevos combustibles alternativos y soluciones bajas en carbono que ayudarán a acelerar la transición energética del sector del transporte marítimo”, declaró Carol Howle, vicepresidenta ejecutiva de Comercio y Transporte Marítimo de BP.
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