KFC ha utilizado un conjunto de vehículos autónomos que se encargan de repartir comida en las calles de China.
La pandemia ha modificado la forma en que las empresas realizan algunas de sus operaciones, han acelerado la implementación de estrategias y tecnologías para mantenerse a flote, adicionalmente, se han adaptado para cumplir normas de higiene que mantienen a sus clientes y empleados seguros.
Ejemplo de lo anteriormente mencionado es el último movimiento ejecutado por KFC en China. Un usuario de Twitter registró la actividad de algunos vehículos que la compañía de comida rápida utilizó para repartir sus productos. Estos vehículos tenían como característica principal que eran autónomos, es decir, no llevaban un conductor a bordo.
Cabe destacar que tampoco había personal atendiendo a los clientes, el producto era entregado a los mismos cuando un teléfono celular con un código QR era empleado para concretar la transacción, posteriormente una puerta se abría y los clientes podían obtener la comida que habían comprado.

No se ha dado más información sobre esta modalidad de venta, tampoco se ha mencionado si será implementada en otros mercados, sin embargo, este es un claro ejemplo de las nuevas tecnologías que distintas industrias utilizan para minimizar el contacto entre personas en el intercambio de bienes y servicios.